La lectura rápida es una técnica que aumenta la velocidad de lectura hasta un 300%. Para alcanzar esta velocidad, el lector debe dividir cada línea de un texto en dos o tres partes, llamadas fotografías. Cada fotografía se debe leer de un vistazo, lo cual se logra fijando la vista en el medio de la misma y captando el resto con la visión periférica.Para facilitar la lectura rápida, se utiliza el dedo para guiarnos a través de las fotografías. Idealmente, cada fotografía estará limitada por elementos que impliquen el final de una frase: signos de puntuación, sustantivos y adjetivos. Así mismo, es necesario evitar la subvocalización.
La lectura tradicional nos enseña a leer letra por letra y sin usar los dedos, lo cual provoca un mayor cansancio visual, más relecturas y mayor lentitud. La lectura rápida, al contrario, disminuye el cansancio visual, reduce el número de lecturas y aumentar la velocidad.
Existen diversos libros sobre lectura rápida, pero recomiendo el Curso Definitivo de Lectura Rápida de Ramón Campayo, en español y con software para practicar, y Speed Reading for Dummies, por un menor precio y en inglés.